Para muchas mujeres, incluyéndome, el maquillaje ha dejado de ser una simple tarea rutinaria que realizas antes de salir y se ha convertido en una actividad artística que te permite expresarte y experimentar con diferentes técnicas, colores, recursos y efectos.
Sin embargo, el mundo del maquillaje ofrece un sinfín de posibilidades que no están ni cerca de haberse explorado. Podemos hacer más que solo aplicar unos toques de polvo o retocarnos los ojos con un delineador, y por desgracia, muchas no lo saben.
Pero basta de eso, porque aquí te hablaré de 6 tipos de maquillajes que puedes probar en ocasiones especiales.
1. Maquillaje de día a día
Como su nombre lo indica, este es el maquillaje que te aplicas al salir a la calle para hacer tus actividades diarias. Suele ser sencillo de aplicar y bastante simple, ya que consiste generalmente en una primera fase con base ligera y un tono suave.
Sin embargo, puedes trabajarlo un poco más e incluir rubor o labial para darle un look más completo. También puedes usarlo para corregir las imperfecciones del cutis como manchas, ojeras y acné, o también si deseas disimular tus pecas.
También puedes completarlo con un resaltador para pestañas que combine con el tono de tu cabello. Un resaltador marrón combina con cabellos claros o rojizos, y un resaltador negro combina con cabellos oscuros.
Pero hablando de forma general, este maquillaje puede ser utilizado con cualquier clase de productos, siempre y cuando todos tengan la misma calidad de fabricación y sean adecuados para tu tono de piel.
2. Maquillaje de día con toques resaltados
Este es un poco similar al anterior y es más ligero que el maquillaje nocturno, pero también es un poco más cargado que el maquillaje de día común y corriente, y presenta tonos más luminosos donde suelen predominar los tonos rosas, dorados y marrones.
Este tipo de maquillaje también suele involucrar un rubor ligeramente rosado que se distribuye de forma compacta sobre los pómulos. Si buscas un estilo más sofisticado, lo puedes completar con un contorno de ojos marrón y un poco de sombra con tonos cálidos.
Pero si buscas un acabado chic, puedes hacerte un delineado que deje una colita al final de los ojos (efecto de ojo de gato o egipcio), y usar un lápiz labial rojo o más rosado que el del tono de tus propios labios. Este look es fresco, natural y captará la mirada de todos.
Cabe destacar que este estilo es el que generalmente se usa al grabar videos y películas, ya que la pantalla magnifica los efectos de la piel. Por ende, debes usar productos que dejen un acabado natural con bastante precisión y usar un color duradero y consistente.
3. Maquillaje teatral
A partir de aquí es que la intensidad de los maquillajes sube considerablemente ya que, al menos en este caso, es necesario usar productos más condensados y saturados porque debes optar por un look pigmentado, duradero y que exagere las expresiones faciales del portador.
Como su nombre indica, este se usa en las obras de teatro o en recitales musicales donde los actores deben maquillarse para representar un personaje. En estos casos, generalmente se recomienda resaltar los ojos con sombras que sean del mismo color y tono del iris, creará un efecto hipnotizante.
También se recomiendan tonos intensos para los labios, pero esto dependerá del contexto y las consideraciones del maquillador. El rubor también es muy común, pero a diferencia de los puestos anteriores, aquí el rubor es pigmentado, tiene tonos saturados, deja un acabado mate.
Entre los colores más utilizados se mencionan la paleta de dorado, marrón y negro.
No obstante, a veces el rubor es del mismo tono que los labios. Finiquitar todos estos detalles dependerá de la apreciación final del maquillador.
4. Maquillaje para fotos
Este es el maquillaje usado para sesiones fotográficas y es mucho menos condensado que el maquillaje teatral. Sin embargo, para conseguir el look apropiado necesitas productos especiales que resalten tus facciones faciales ante la cámara.
Aquí puedes optar por clásicos lápices labiales de color rojo o rosado, acompañado de unas sombras para párpados oscuras y un delineado del mismo tono. Aquí también se le da mucha importancia a la prolijidad y luminosidad de la piel, así como suavizar las imperfecciones.
5. Maquillaje de noche
Si el maquillaje de día se suele utilizar para actividades rutinarias, el maquillaje de noche se usa para salir a fiestas, bodas u otros eventos más glamurosos.
Ahora, el maquillaje nocturno siempre busca construir looks elegantes y algo cargados. Para esto, lo más común es usar colores intensos, mezclarlos como creas apropiado y experimentar con ellos. Que sean muy intensos no importará, porque la luz atenúa todo el maquillaje.
Aquí las sombras no deben ser del mismo tono del iris, ya que este maquillaje destaca más por crear un efecto claroscuro donde se usen tonos complementarios. Sumado a eso, se recomienda que los labios sean de color rojo o fucsia, pero con tonos vibrantes.
Por otro lado, es importante que el polvo de los pómulos sea de la misma gama que el labial aplicado para que así todo el conjunto tenga armonía. También puedes agregar un delineado que le dé más intensidad a tu mirada.
Eso sí, ten en cuenta que si recargas tus ojos de colores intensos, entonces tus labios deben ser más ligeros y viceversa. Como te dije, aquí el claroscuro importa bastante.
6. Ojos ahumados
El maquillaje de ojos ahumados o ‘’smokey eyes’’ es muy similar al maquillaje nocturno estándar, con la diferencia de que este se concentra más en resaltar los ojos y hacer que estos encandilen con la mirada.
Generalmente, este maquillaje da un look muy sexy, así que se recomienda usar con vestimentas simples a las que un maquillaje como este les dé un atractivo inesperado.
Una forma de hacer esto es degradar la sombra dentro del mismo tono. Por ejemplo: si eliges unas sombras con tonos oscuros, estas irán desde el verde oscuro en la parte externa del ojo hasta el verde claro hacia el interior del mismo ojo. Los tonos van gradualmente bajando a medida que cubres el ojo.
En este maquillaje también es muy común que los labios tengan un color nude (es decir, un color parecido al de tu tono natural de piel) para darle más notoriedad a tus ojos y hacer que todo el rostro tenga armonía, sin llegar a sobrecargarlo. Un marrón o rosa suave funcionan perfectamente en estos casos.
¿En qué se dividen los tipos de maquillaje?
Ahora que te explique los tipos de maquillaje más comunes, es importante destacar que estos se dividen en dos grupos: el maquillaje intenso y el maquillaje ‘’nude’’ o natural. Los estilos de maquillaje se pueden clasificar de muchas formas, pero esos son los dos grupos más comunes.
El maquillaje de día estándar, el maquillaje de día con toques resaltados y el maquillaje fotográfico entran en la categoría de natural. Por otra parte, el maquillaje teatral, el maquillaje nocturno y el maquillaje de ojos ahumados entran en la categoría de intenso.
Cualquier otro estilo de maquillaje entrará en una de estas dos categorías y es tu deber identificar cuál se adapta mejor a cada contexto, para tener una mejor idea del look ideal a conseguir.
¿Qué combinaciones funcionan?
Aunque el maquillaje sirve para combinar colores a tu antojo, existen algunas reglas generales que te ayudarán a guiarte hasta el momento de combinar los colores. De esa forma, sabrás qué resultados tendrás y cuáles son mejores.
Para empezar, el tono del maquillaje debe ser compatible con el iris de los ojos. Por ejemplo, los ojos verdes destacan con tonos rojizos, naranjas y violetas.
Los ojos marrones destacan con tonos cálidos y fríos, sean marrones, dorados, verdes o azules, Por otro lado, los ojos azules destacan con tonos suaves como rosa y naranja.
Por último pero no menos importante, se encuentran los ojos oscuros. Algunas personas inferiorizan los efectos que se pueden lograr en ojos de tonalidad oscura, lo cual está muy alejado de la realidad. Es precisamente en estos casos cuando el contraste de paletas con tonalidad tropicales y cálidas adopta protagonismo.
Los tonos metalizados también generan un hermoso efecto, el cual puedes reforzar con un lápiz delineador blanco que reforzará la intensidad de la mirada.
Un dato sobre un común error que debes evitar a toda costa, en aprender como regla general que los tonos fríos no deben ser mezclados con los tonos cálidos, ya que proyectarán una imagen sobrecargada y confusa.
Recuerda divertirte sobre todas las cosas, te ayudará a expresarte y a conocer las facciones de tu rostro, como resaltar cada una de ellas y proyectarte al mundo segura de ti misma.